Las mujeres siempre han tenido un lugar importante en el mundo de la joyería desde tiempos remotos, viéndolo desde muchos ángulos y englobando a las que dedican su vida a la creación y diseño de estas, hasta las clásicas mujeres que únicamente lucen estas piezas de arte. Todas estas mujeres forman parte del mundo de la joyería o mejor dicho son un complemento a la misma, llevándola a una renovación inspirándola a crecer, evolucionar e innovar con nuevas tendencias con el paso del tiempo.

Desde muy pequeñas las mujeres hacen que la joyería forme parte de su vida ya que a los pocos meses de nacer las madres se ocupan de ponerles pequeños pendientes de oro que llevan durante la niñez y pequeñas pulseras que les brindan protección, posteriormente estos accesorios se van cambiando por otros según la edad hasta que ya son adolescentes y ellas mismas van renovando sus accesorios e incorporando otras joyas a su cuerpo como colgantes, anillos, collares y pulseras.

Los regalos toman parte importante en la vida de las personas, pero las joyas son en muchas formas más especiales porque casi siempre están vinculadas a un recuerdo romántico y otros momentos importantes en la vida de una mujer, por ejemplo, la pedida de mano, el día de la boda, un regalo de un hijo a una madre en su cumpleaños, o de una madre a su hija de una joya de familia que ha sido heredada de generación en generación.

Como sabemos las joyas son piedras que provienen de la madre tierra, normalmente se encuentran en minas, donde a lo largo del tiempo fueron obteniendo un lugar en la economía del mundo y un lugar muy importante en la vida de las mujeres. Es común pensar en mujeres cuando hablamos de joyería, pero los hombres también juegan un papel en este mundo usando collares, anillos o pulseras.